Problemas actuales de la educación matemática en España

Miguel de Guzmán
Universidad Complutense de Madrid


¿Por qué hay problemas tan frecuentemente alrededor de la educación matemática? La educación matemática es tarea difícil. Razones.

  La matemática es una actividad vieja y polivalente. A lo largo de los siglos ha sido empleada con objetivos profundamente diversos. Fue un instrumento para la elaboración de vaticinios, entre los sacerdotes de los pueblos mesopotámicos. Se consideró como un medio de aproximación a una vida más profundamente humana y como camino de acercamiento a la divinidad, entre los pitagóricos. Fue utilizado como un importante elemento disciplinador del pensamiento, en el Medievo. Ha sido la más versátil e idónea herramienta para la exploración del universo, a partir del Renacimiento. Ha constituído una magnífica guía del pensamiento filosófico, entre los pensadores del racionalismo y filósofos contemporáneos. Ha sido un instrumento de creación de belleza artística, un campo de ejercicio lúdico, entre los matemáticos de todos los tiempos...

    Por otra parte, la matemática misma es una ciencia intensamente dinámica y cambiante. De manera rápida y hasta turbulenta en sus propios contenidos. Y aun en su propia concepción profunda, aunque de modo más lento. Todo ello sugiere que, efectivamente, la actividad matemática no puede ser una realidad de abordaje sencillo.

    El otro miembro del binomio educación-matemática, no es tampoco nada simple. La educación ha de hacer necesariamente referencia a lo más profundo de la persona, una persona aún por conformar, a la sociedad en evolución en la que esta persona se ha de integrar, a la cultura que en esta sociedad se desarrolla, a los medios concretos personales y materiales de que en el momento se puede o se quiere disponer, a las finalidades prioritarias que a esta educación se le quiera asignar, que pueden ser extraordinariamente variadas...

    La complejidad de la matemática y de la educación sugiere que los teóricos de la educación matemática, y no menos los agentes de ella, deban permanecer constantemente atentos y abiertos a los cambios profundos que en muchos aspectos la dinámica rápidamente mutante de la situación global venga exigiendo.

     La educación, como todo sistema complejo, presenta una fuerte resistencia al cambio. Esto no es necesariamente malo. Una razonable persistencia ante las variaciones es la característica de los organismos vivos sanos. Lo malo ocurre cuando esto no se conjuga con una capacidad de adaptación ante la mutabilidad de las circunstancias ambientales.


Un problema en la base. La educación en la valoración de la Sociedad.
Actualmente estamos de acuerdo en que la educación es buena y que hay que promocionarla, extenderla, cuidarla. Es un principio teóricamente aceptado en nuestra sociedad, pero no parecen aceptarse las consecuencias. Si efectivamente pensamos que la educación es para nuestra sociedad más importante que nuestro ejército y que muchas de las obras públicas en las que se derrochan medios en abundancia, si de veras sabemos que los medios que nuestra educación necesitaría para ser como debe ser son caros, que las inversiones deberían ser muy importantes, seguramente que en nuestra población se manifestaría otra actitud y que nuestros políticos actuarían de forma menos cicatera....

Los profesores necesitan formación, necesitan tiempo, necesitan leer, necesitan experimentar, necesitan contacto con otros profesores,... Nuestras aulas necesitan medios, nuestras escuelas necesitan espacios abiertos, necesitan laboratorios,...

¿Qué tipo de educación? ¿Cuál queremos que sea el resultado de nuestra educación primaria y secundaria? ¿Acaso lo sabemos de veras? Muy probablemente estamos trabajando con con objetivos, confusos, tal vez antagónicos. Tal vez estamos haciendo lo que sabemos hacer porque se ha hecho siempre y no nos preocupamos de prepararnos para lo que hay que hacer y no se ha hecho nunca. Probablemente nos falta una reflexión profunda sobre lo que con nuestra educación en general y con nuestra educación matemática muy en particular debemos tratar de obtener. ¿Sabemos lo que queremos? ¿Tenemos un objetivo claro con nuestra educación primaria? ¿con nuestra educación secundaria? ¿está nuestra sociedad dispuesta de veras a poner los medios adecuados?

Una primera tarea fundamental: explorar a fondo qué es lo que se puede, qué es lo que se debe pretender con la educación matemática de cada nivel. Suscitar un consenso. Estudiar las dificultades y cómo sortearlas. Poner los medios adecuados. A continuación señalaré unos cuantos problemas concretos que atañen, a mi parecer, a diversos aspectos de nuestra educación matemática.




Problemas relacionados con la Primaria

La importancia de la primera formación en matemáticas.
Probablemente ahí está la raíz de una buena parte de nuestros males. Del primer contacto con la matemática es de donde nacen la actitud que conforma la manera definitiva en la que una persona se coloca frente a tal o cual materia. Los primeros bloqueos y los primeros entusiasmos suelen ser una componente definitiva de la personalidad.

Un importante problema de fondo: Objetivos confusos.
Vamos a examinar el problema de los objetivos un poco más de cerca.
¿Qué se puede pretender? Una buena variedad de objetivos posibles. ¿Qué escogemos, con qué nos quedamos? Una selección ciertamente subjetiva y sujeta a polémica. La educación matemática puede servir para formar la persona, para adquirir los conocimientos normales que todo ciudadano debería tener a su disposición, para empezar a prepararse para una formación ulterior profesional más profunda,...
¿Qué estamos haciendo en el fondo con el tiempo dedicado a la matemática en la enseñanza primaria? ¿Sabemos lo que es y lo que puede ser la matemática a estos niveles?
Cuentas, memorización de tablas, rutinas,... Muchas de estas cosas están muy bien, pero sólo eso es muy pobre. Se trata de técnicas de las que cada uno debe disponer de una forma refleja, sin gran esfuerzo, para sentirse a gusto cuando tiene que conjugar tal ejercicio con el ejercicio propiamente matemático de pensar experimentar, conjeturar... para resolver los problemas con los que se enfrenta. Sería muy importante memorizar también métodos, formas de pensar, técnicas para resolver problemas diversos,...

Los prerrequisitos.
Y esto a través de actividades atrayentes, motivadoras, que muestren el poder de la matemática realmente, que muestren sus aplicaciones, que pongan de manifiesto los muchos aspectos realmente bellos de la actividad matemmática así como del carácter lúdico y curioso del que está impregnada.
¿Cómo? A través de acividades modelo, de problemas, para los cuales se requiere una profunda preparación de los profesores, en su formación inicial, en su preparación permanente, con tiempo para pensar, para intercambiar ideas, para leer ey estudiar ellos mismos continuamente...Pero ¿donde están los profesores capaces de dirigir de este modo el aprendizaje? ¿de dónde pueden sacar el tiempo necesario los profesores para aprender y experimentar ellos mismos?
¿Saben los profesores mismos del valor de las matemáticas, de su belleza, de sus atractivos? La enseñanza de la música, en los niveles primario y secundario, la podríamos poner en manos de quienes no gusten en absoluto la música o la literatura? Se puede y se hace ¿con qué resultado?

¿Qué dificultades se pueden presentir?
La idea prevalente sobre las matemáticas en la población, a través de los medios de comunicación, entre los padres, incluso entre los profesores de primaria, los programas que son propuestos, el tiempo que se dedica,...
Es necesario incidir en estos problemas a corto y a largo plazo, bien conscientes de que la modificación profunda que requiere nuestro sistema educativo no es tarea de cinco años, sino de décadas.


Algunos problemas relacionados con los profesores de Primaria.

Un problema profundo que tiene que ver con la valoración que nuestra sociedad hace de la educación es el de la baja autoestima que los muchos de los profesores de primaria tienen de sí mismos. Es necesario revalorizar la tarea del enseñante para que adquiera una verdaderamente apreciada conciencia profesional, con ganas de hacer cada vez mejor su trabajo, con interés por prepararse cada vez más profundamente para él, con el entusiasmo que le es tan imprescindible transmitir a sus alumnos.

Los profesores de primaria son generalistas. ¿Podría ser de otra manera? ¿Convendría que fuera de otra manera? Algunos centros privados tienen euipos de profesores de primaria organizados de otra manera diferente que en la enseñanza pública ¿Se podría hacer, que compartieran enseñanza dos profesores con una tendencia complementaria en su formación? ¿Se podría lograr que diferentes centros compartieran profesorado para conseguirlo? No se trata de que los conocimientos sean insuficientes. Es un problema de actitud hacia su tarea.

La formación en matemáticas de los profesores de primaria es claramente insuficiente. Se suele dar un excesivo énfasis en los aspectos puramente didácticos como si la tarea de cada uno de los futuros profesores fuera a resultar un teórico de la educación. Los contenidos específicos matemáticos han sido en otro tiempo inadecuados (demasiado teóricos, demasiada álgebra abstracta, demasiado análisis matemático probablemente inútil para lo que con ello se pretende...). Hoy día los contenidos matemáticos son prácticamente inexistentes. Se da por otra parte una gran carencia en la vertiente didáctica de los aspectos matemáticos realmente motivadores, sin atención a los elementos de atracción para quienes se van a dirigir. Nada de Historia de la Matemática. Nada de juegos matemáticos.


El problema de la actitud que debemos perseguir.
El primer problema es que en muchos casos la actitud de los profesores mismos respecto de la matemática no es correcta. No se les ha dado oportunidad suficiente para apreciar ellos mismos lo que la matemática es, para adquirir ellos mismos una actitud de entusiasmo por la racionalidad de la matemática, por el orden, certeza, capacidad de consenso, utilidad, sentido lúdico, belleza intelectual, armonía,... Si se piensa que la matemática consiste en manipular números o símbolos, entonces nada nos puede extrañar el hecho de que tantos de los alumnos acaben con una especial aversión por la matemática, que se extiende tanto por nuestra sociedad culta. La matemática es rollo, aburrimiento, rutina, atención servil a unos procedimientos, a unas reglas,...


Contenidos y las actividades alrededor de ellos.
¿Son los contenidos los más adecuados? Se puede pensar en alternativas tal vez más razonables. Vamos siendo más y más los que pensamos que el énfasis, que proviene de siglos pasados, en las rutinas aritméticas, en gran parte inmotivadas, no constituyen el núcleo de contenidos más adecuados. Deberíamos ponernos de acuerdo sobre los contenidos razonables para una cultura como la nuestra. El acuerdo tácito con el que estamos operando es bastante insatisfactorio.

¿Se da un equilibrio adecuado entre la rutina necesaria y la actividad motivadora en torno a la matemática? La memorización y las rutinas son sanas y necesarias, pero mi parecer es que no hemos llegado al  justo medio entre lo tradicional y lo que la situación actual requeriría, al punto adecuado entre creatividad y trabajo rutinario.


Problemas relacionados con la situación de los alumnos.
En muchos casos se trata de un problema social importante. Los alumnos proceden de un ambiente social y familiar en que la educación no se valora o bien se hace difícil, tal vez imposible, en que las circunstancias afectivas hacen muy dificultosa una entrega con paz a las tareas que se les requiere.

En primaria los alumnos no repiten, a menos que la familia lo pida. De hecho no repite casi ninguno. ¿Problemas? Acumulación de lagunas de conocimientos y de carencias de procesos. ¿Cómo resolverlos?

Aulas de 28 alumnos. No muchos, pero pueden ser muy distintos. Se dificulta la dirección de la clase como una unidad. ¿Alternativas? Si queremos una educación de calidad habrá que tratar de atender muchos aspectos que ahora descuidamos. Se dan con mucha frecuencia situaciones en las que los profesores tienen que intentar lo imposible.


Problemas relacionados con los textos.
¿Son los textos adecuados?
Los textos son producidos por las grandes editoriales que buscan fundamentalmente hacer negocio. ¿Resultado? Ajuste de los textos y de las maneras de proceder a lo que los profesores tal como son están esperando. Un texto de vanguardia no se vende. Lo que los profesores quieren es una buena colección de ejercicios. Y así se perpetúa el círculo vicioso. Tal vez se podría proceder de otra forma en lo que se refiere a la producción de textos.

¿Son los textos usados adecuadamente?
En muchas ocasiones se utiliza de los textos las colecciones de ejercicios que se proponen y nada más. Muy frecuentemente se pierde todo el trabajo realizado en otros aspectos didácticos que los autores han trabajado mucho más a fondo de lo que parece.


Otras herramientas de aprendizaje.

¿Sabemos cuál es el uso y los modos correctos de las máquinas de calcular y de los ordenadores en la primaria? Una idea general válida consiste en atender a lo que más importa: entender y saber cuál es la pregunta que hay que hacer a la máquina. Y para ello conocer a fondo dónde están los problemas. Primero de todo sin herramientas ni andaderas más que la cabeza. El problema en una situación fácil, lo más sencilla que se pueda. Donde la estructura del problema no queda oscurecida por otras dificultades. Atender a la forma de proceder que se va cristalizando en los lugares donde tienen experiencia de años en la utilización de máquinas.
Por supuesto que hay muchas dificultades. Ni siquiera en la universidad son muchos los profesores que para su trabajo normal, para su trabajo docente, utilizan normalmente las herramientas de las que ahora disponemos. Esto requiere tradición, requiere experiencia, requiere haberlo visto bien hecho....

¿Utilizamos adecuadamente otros medios a nuestra disposición? Internet, medios audiovisuales, actividades manuales ricas y profundas,....


Problemas relativos a la interacción en el aula.

Que el conocimiento propio se lo construye uno mismo, por supuesto no sin guía, es algo que está suficientemente probado científicamente desde hace tiempo. ¿Ajustamos nuestra forma de proceder en el aula a ésta verdad? Mi opinión es que estamos bastante lejos de ello y muy cercanos a lo que hemos visto hacer desde hace muchos años.

¿Es posible la atención adecuadas con grupos tan heterogéneos como se dan hoy día en el aula de primaria? ¿Se podría organizar la actividad de modo que hubiera grupos con necesidades más parecidas? Existen alternativas posibles, en las que no podría extenderme.

¿Es el tiempo dedicado a matemáticas suficiente? Si miramos a la necesidad de una orientación muy diferente de las necesidades de una educación matemática bien realizada, con paz, con reposo suficiente para el asentamiento profundo de las ideas, de los métodos del quehacer matemático, claramente no. Extrínsecamente si ponemos los ojos en los países de nuestro entorno, es también obvio que no.




Problemas relacionados con la Secundaria

Problemas relacionados con los profesores de Secundaria.

En buena parte coinciden con los mencionados antes relativos a los profesores de Primaria. Pero pienso que hay algunos específicos.
 

La pPreparación de los profesores de secundaria que provienen de las Facultades de Matemáticas se suele realizar como si fueran a hacer todos investigación en matemáticas. Demasiado contenido matemático y demasiado poco en lo que ayudaría a su ejercicio futuro como docentes. Generalmente nada de psicología del aprendizaje matemático. Nada de Historia de la Matemática. Nada de instrumentos concretos para la didáctica: juegos, modelos, aplicaciones,...
 

La preparación de los profesores que provienen de otras Facultades (hay una gran parte que proviene de Facultades de Química, Biología,...) contiene muy escasos conocimientos de matemática. Esto les genera una gran inseguridad incluso en lo que se refiere a aspectos muy elementales de su ejercicio.


Objetivos de la educación matemática en la Secundaria.
Aquí parece haber una seria distorsión. Hemos hecho un cambio muy radical. Hemos introducido la formación secundaria hasta los 16 años para todos. No hemos cambiado los profesores. No hemos cambiado los programas. No nos hemos pensado en nuevos objetivos. Está claro que no pueden ser los mismos que antes.

¿Hemos realizado algún esfuerzo por poner luz sobre los objetivos actuales adecuados de la educación matemática en secundaria? Es razonable pensar que sean otros bastante distintos de los que hasta ahora tal vez nos venían sirviendo ¿Se puede pensar en una prioridad y diversificación de objetivos de acuerdo con el tipo de alumnos? Si antes se pregonaba la conveniencia de la atención a la diversidad, ahora se trata de una absoluta necesidad.
 


Contenidos.

¿Qué es lo que debemos pretender con los contenidos de nuestra actual enseñanza secundaria? Las posibilidades son muchas y bien diferentes:
¿una apreciación de lo que es la ciencia y la matemática?
¿un inicio de preparación técnica hacia las herramientas que el ciudadano ha de usar en su vida psterior?
¿una preparación hacia la universidad?
¿todo ello?
¿cuáles son las prioridades?


Alumnos.
Los problemas de inmotivación en la ESO son muy grandes en una buena porción de nuestros alumnos.

Los problemas de la heterogeneidad de las clases constituyen una dificultad ahora mismo insoslayable. Se está pidiendo lo imposible a una buena parte de los profesores.


Textos.
¿Son adecuados? ¿Se usan adecuadamente? Valen las mismas consideraciones que alrededor de la primaria.

Nuevas herramientas
*La enorme inercia respecto de las nuevas herramientas por parte de una mayoría de los profesores. ¿Imposibilidad de reciclamiento aunque se quisiera? ¿Falta de motivación? ¿Alguien les enseña lo que se podría hacer?
*¿Sabemos cómo usar adecuadamente el ordenador en la enseñanza?


Formas de interacción.
¿Es el tiempo dedicado a matemáticas suficiente? Claramente no y por diversos motivos. ¿Es posible la atención adecuada con grupos tan heterogéneos como se dan hoy día en el aula de primaria? Muchos de los que comienzan la ESO no tienen adquiridas ni las rutinas más elementales. ¿Se podría organizar la actividad de modo que hubiera grupos con necesidades más parecidas? Alternativas posibles.

¿Énfasis en el aprendizaje rutinario también en secundaria? Mi opinión es que sí se da, en gran parte ocasionado por las circunstancias de las relaciones profesor-alumno y  también en una buena proporción por las consideraciones que muchos profesores se hacen respecto de lo que sus alumnos han de conseguir después con sus conocimientos matemáticos.

¿Tendencia tradicional al aprendizaje pasivo? La misma estructura física que normalmente se da en nuestras aulas, con todos los alumnos mirando hacia el profesor revela una actitud que no corresponde a lo que sería deseable.



Relación Secundaria-Universidad.
La secundaria está en gran parte condicionada por la Universidad de diversas formas. ¿Es deseable? ¿Se podría pensar en otras formas de enlace? ¿Cuáles? Podemos mirar a otras formas de solución distintas que hemos usado y también a otros países de nuestro entorno.

Como se puede apreciar, tenemos una buena cantidad de problemas profundos en nuestro actual sistema educativo primario y secundario. Los de la universidad merecerían consideración aparte. Las tareas por delante parecen arduas y para muchos años, tanto por razón de la seriedad de las dificultades como por la inercia propia del sistema educativo. Pero es preciso que nos fijemos unos objetivos bien pensados a fin de que al menos sepamos cuál debe ser nuestro rumbo.